miércoles, 30 de abril de 2008

El Chelsea se hace grande (Chelsea 3 - 2 Liverpool)

Andrés Pérez | Era complicado encontrar algo que pudiera fallar anoche. Chelsea, Liverpool, Londres, lluvia, barro, fútbol inglés, emoción, noche de champions y grandes jugadores. Lo complicado se transformó en obvio al cabo de cinco minutos. Buen fútbol. Porque, sí, hubo emoción a raudales, pero faltó buen fútbol, jugadas combinadas y en definitiva, calidad sobre el césped. Y no porque los jugadores no la atesoraran, sino porque, salvo el Arsenal, en Inglaterra, la calidad no es un factor primordial. la constancia, el físico y la verticalidad se ven más premiadas que un simple bonito pase. Incluso la metereología se alió con la Copa de Europa, como tantas otra veces, para desvelar el misterio: la pareja de baile en Moscú a mediados de mayo del Manchester United. Fue el Chelsea. Tras otra prórroga, tras otra eliminatoria igualadísima hasta el último minuto, tras otra exhibición de coraje y de fuerza. Tras otra semifinal que, lejos de ser gloriosa, fue emocionante y pasará a la historia precisamente por eso. Cuando el fútbol falla lo único que podemos pedir es emoción, por eso, sería conveniente dar las gracias al fútbol inglés y al Liverpool y al Chelsea por brindarnos lo que hace al fútbol el deporte universal: La posibilidad de lo imposible.


El pase a la final del Chelsea es casi de mal gusto. Sin entrar a valorar la labor de Avan Grant salta a la vista que el Chelsea que viajará a Moscú es herencia al completo del ya alejado Mourinho. Es casi morboso y de mal gusto, por tanto, que ahora, cuando Mourinho está de vacaciones, finalmente el Chelsea se acerque al tan ansiado sueño de Abramovich. La Copa de Europa. Tres semifinales y unos cuartos de final después el Chelsea está en la final. Es, lo que comúnmente se denomina hacerse grande. Grande ya era el Liverpool, desde hace mucho. Su grandeza ahora vive de glorias, gestas a las que tan sólo equipos destinados a la gloria como el propio Liverpool, el Milan o el Real Madrid están destinados. El Liverpool alcanza una cuota de mística que ningún otro equipo en el mundo puede atesorar. Su valor, hoy en día, es el de ganar y ganar para una afición que nunca se cansará de animar. Su valor, es el de seguir creando un equipo ganador que poco a poco y basado en el tremendo éxito de la Copa de Europa del 2005 terminará convirtiéndose en un grandísimo equipo, de nuevo. Si el Liverpool, con todas las carencias que tiene, con todos aquellos jugadores que dicen no tener nivel para jugar en un club que siempre aspira a todo alcanza año sí y casi año también las semifinales de la Copa de Europa, no quiero imaginar que podría ocurrir con dos o tres años más de dinero traído de América. Probablemente nunca lo sepamos, porque probablemente Benítez no alcance esa fecha si el equipo sigue sin ganar una Liga, pero, en caso de que fuera así, recordaré felizmente cuando un equipo de jugadores mediocres venció al todopoderoso Milan una noche en Estambul, en 2005.


Pero este añó no será el del Liverpool. Es el del fútbol inglés personificado en Chelsea y Manchester United. Especial felicitación merece el Chelsea, equipo, como ya he dicho, que se ha hecho grande a base de caer en eliminatorias durante cuatro años seguidos. A base de aprender de los grandes. El dinero da grandes equipos, pero saber llegar a la final de la Copa de Europa no lo producen los petrodólares, sino la experiencia que adquieres cuando Barcelona, Milan, Liverpool o Real Madrid te han apeado de tu sueño europeo. Ahora sí el Chelsea es un grande. Ahora, su camino, gane o no gane la Copa de Europa, se ha visto completado. Tiene un aval que presentar cada año, y si alza la orejuda finalmente, aún más. Encomiable por tanto es lo de los blues. Es el ejemplo perfecto del empeño y del no rendirse nunca. Ejemplo, que personifica Drogba, el delantero total y hoy por hoy el mejor delantero del planeta. No hay futbolista que actualmente combine de la manera que lo hace Drogba tal capacidad técnica, táctica y física. Lo tiene todo y parece imparable. Acapara más del 70% del juego ofensivo del Chelsea y aún sabiendo los rivales que siempre serán sus botas las que canalicen los ataques de los londinenses no lo pueden parar. El hombre de la semifinal, sin duda.


El trabajo de Drogba se ve refutado por una defensa de hierro, por un genio como Lampard y por un recuperado Ballack. Todos ellos salieron al lluvioso campo de Stamford Bridge dominando y con muchas más ocasiones de gol que un dormido Liverpool. El Chelsea era mucho mejor, tenía muchas más ocasiones y certificaba con su actitud su probable pase a la final. Tal fue la avalancha de los de Grant que el gol terminó llegando tras un fallo clamoroso de Arbeloa en defensa. Extraño nerviosismo mostraba la zaga del Liverpool anoche, nerviosismo que finalmente se ha mostrado definitivo en jugadas clave del partido. Si por algo se caracterizaba el Liverpool en Europa más allá de su gloria particular, era por cometer cero fallos cada partido en defensa. Anoche los tuvieron. Y con Drogba enfrente firmaron su sentencia de muerte. Volviendo a la jugada, un pase en profundidad de Lampard a Kalou lo terminó aprovechando el inefable Drogba para con un disparo perfecto batir a Reina. Era el minuto 32 y si nada cambiaba el Chelsea iba a arrasar al Liverpool.


Torres arriba estaba muy solo, Alonso no estaba cuajando su mejor partido, Gerrard no tocaba bola gracias a la gran labor del inagotable Makélélé y Kuyt estaba demasiado disperso en la banda, más allá de su infalible entrega habitual. Las charlas de Benítez en los descansos deberían ser estudiadas alguna vez. Comenzó la segunda parte y Xabi Alonso se puso a los mandos del Liverpool para dominar descaradamente a un Chelsea de metal que esperaba cómodamente en su campo. Cómodamente, todo hay que decirlo. Las buenas intenciones del Liverpool, que siempre combinó más y jugó relativamente mejor, recordaban al Barça del martes, empeñado en tocar pero sin crear ocasiones. Así caminaban los reds hasta que Benayoun dejó su seña de indentidad por Stamford Bridge. Arrancó desde la banda derecha, dejó en el camino a cuatro jugadores rivales y con un magnífico pase entre líneas dejó que Torres hiciera su trabajo. Trabajo, perfectamente culminado ante la salida de Cech. Cristiano Ronaldo debería aprender de Drogba o Torres, estrellas que en los partidos grandes no se ocultan. Se crecen. Hoy por hoy, ambos, Drogba y Torres, son los dos mejores delanteros del planeta.


El Chelsea recordó los fantasmas de los años anteriores y se amedrentó. Entre ellos Drogba. El Liverpool fue el dueño y señor de la segunda parte pero no consiguió marcar un gol que se hubiera mostrado definitivo. Prórroga de nuevo y a sufrir ambos equipos. La prórroga dejó en evidencia las carencias del Liverpool en defensa durante todo el partido. El Chelsea comenzó mejor la primera parte del tiempo añadido pero daba igual, era un partido descaradamente de ida y vuelta. Puramente inglés, aderezado con la mística de la Copa de Europa, claro. Corría el 98' y a Hyppia le entró un arrebato de juvenil. Nerviosísimo, entró a Ballack en la esquina del área. Penalty claro ante la incredulidad de los presentes. Hyppia, curtido en mil y una batallas perdiendo la cabeza en una jugada clave del partido. Anteriormente Rosseti había anulado correctamente un gol de Essien por fuera de juego de Carvalho, que estorbaba a Reina. Con remordimiento o sin él, no dudo en pitar la pena máxima que Lampard ejecutó a la perfección. Literalmente. En teoría no debería haber afectado al Liverpool pero la salida de Torres y en general el despropósito tras un gol inesperado dejaron sin capacidad de reacción a los de Benítez. Un penalty bastante claro a Hyppia, un gol en fuera de juego del Chelsea y un golazo de Babel tras cantada de Cech después, el Liverpool estaba en casa y el Chelsea en Moscú jugándoselo todo a una carta con el Manchester, como en la Premier. Los del norte podrán excusarse en Rosseti, en ese penalty a Hyppia o en ese fuera de juego de Malouda en el tercer gol del Chelsea, pero tal y como me negué en los cuartos de final frente al Arsenal, me niego y se deberían negar a creer que están fuera por el árbitro. Un año toca, y otro, Drogba destroza tu sueño. Es así, nadie dijo que los sueños estuvieran reservados a unos cuantos privilegiados. En eso consiste la magia del fútbol, en que los sueños están al alcance de todos. Felicidades Chelsea. Gracias Liverpool.

Vía | Más que Fútbol
Imagen | As, Marca, El País

Más que Fútbol ● 2008

martes, 29 de abril de 2008

No hubiera sido más que un espejismo (Manchester United 1 - 0 Barcelona)


Andrés Pérez | Suele haber dos tipos de elminatorias cruciales. Las que son emotivas, desesperantes y absolutamente conmovedoras, aquellas que pasaran a la historia, y las que por lógica y en esencia no dejan de ser dos partidos mediocres pero aderezados por el drama de una posible eliminación. Tendemos a disfrutar las primeras, tendemos a soñar con las primeras, pero olvidamos de vez en cuando que las segundas suelen ser más habituales. Acostumbrados a las grandes gestas, olvidamos que no todo son heróicas demostraciones humanas de cómo superar la adversidad. Olvidamos, que, en realidad, sigue siendo fútbol, o lo que quizá se adecue más a este tipo de eliminatorias, sigue siendo jugar con los sentimientos de una afición y con el dinero de un empresario, lo primero para gracia de todos y lo segundo para desgracia de los mismos. Decía que tendemos a olvidar aquellas que son eliminatorias en sí mismas, pero Manchester United y Barcelona se empeñaron en proveernos del dudoso honor de contemplar una más, la última, la definitiva antes de la batalla final en la fría Moscú.


Si algo por los anales de la historia del fútbol es obvio como el propio fútbol mismo es que para marcar algún gol es necesario crear cierto disparo a donde el arquero alcanece o no, dependiendo de la habilidad de lanzador y parador. Los ingleses, por regla general, no especulan y tienen el disparo a puerta como uno de sus principales objetivos cuando saltan a un campo de fútbol. El Barcelona de Rijkaard nunca se preocupó mucho por tan endeble aspecto. Preocupados por la estética jamás dieron importancia a la definición, a la esencia del fútbol, al gol; y en tiempos de vacas flacas se nota. Cuando la estética vuela como volaron los títulos antaño, cuando el buen juego sucumbe ante la apatía si no te queda la pegada no te queda nada. Y en Liga puede que sirva, pero en la Copa de Europa, en fortines como Old Trafford ante mitos vivientes como Scholes, estás perdido. El Manchester no era un amigo, no era el Schalke, ni el Celtic. Y al Barcelona, se le olvidó ese aspecto a la hora de planear el partido. Corrijo. No se le olvidó, nunca supo hacerle frente. Ni ayer, ni desde que comenzó la temporada.


Saltó al campo el Barça comandado una vez más por el magnífico Deco. Un tipo hecho de otra pasta, de esa que no se arruga ante las grandes situaciones a pesar de estar vestida de un azul cielo, hecho en teoría "para alcanzar el mismo cielo". Poemas o insultos a poemas aparte, Deco se elevó en Old Trafford por encima de los demás para mandar en el partido ayudado por Messi, jugador que poco a poco adquiere esa esencia de gran jugador determinante en los partidos de verdad. He de reconocer que vivo enamorado de Cristiano Ronaldo, pero un apunte, no apareció. Y van dos. Y puede que este año esté bien, pero la historia graba los partidos grandes, allí donde Messi comienza a brillar cada vez con más, más y mucha más fuerza. Volviendo a Deco, está infravalorado. Es la pieza esencial del Barcelona en el campo y de que juegue él a que no lo haga hay dos o tres galaxias. No digo ya mundos. Dominaba el Barça hasta que el factor Scholes apareció por el tupido césped de Manchester.


Scholes apuntó a la escuadra una bomba inteligente ante la que nada pudo hacer Valdés. Error de Zambrotta (y van) y el factor Scholes que hace efecto. Con la treintena encima y con todo ganado con el club de toda su vida, Scholes es el prototipo de todocampista 10. Por encima de Gerrard y de Lampard, por encima del propio Deco. No olvidemos que cuando todos ellos comenzaban a andar, Scholes ya reposaba de las carreras que efectuaba por los campos de Europa. 1-0 a favor del Manchester en el minuto 20 y el Barcelona, que hasta entonces dominaba pero no tiraba a puerta, desapareció. Probablemente fueron 15 minutos aptos para que el Manchester marcara dos o tres goles más. Sin ningún tipo de problema. Park ji Sung, que corrió unos 1.220 kilómetros (a ojo), se pegó un partidazo digno de estudio. Como Tévez. Como a ratos Carrick o Nani. Entre todos ellos volvieron loca a la zaga culé, de largo lo peor (si es que hay algo mejor que peor este año en el Barça) de toda la temporada.


Se fue al descanso el Manchester dejándose dominar, dos tiros del inefable Deco y un remate a no sé dónde de Milito. Miedo, pero Van der Sar seguía vivo y lo que era más importante, imbatido. Digo vivo porque Brown se empeñó en matarlo. Tras el gol de Scholes el bueno de Edwin recibió un rodillazo fortuito de Brown. Holandés el hombre, duro, no se dejó amedrentar. Pero un par de cantadas con los pies más tarde ,Brown, sin balón de por medio y en una carrera también ¿fortuita?, le pegó otro rodillazo en la cabeza al pobre hombre. Inexplicable o no, quien mandaba al final de la primera parte no eran otros sino los de azul, los que nunca son bienvenidos en old Trafford, el rival, en este caso el Barça.


Realmente en la segunda parte hubo poco más que contar. Suena triste para la parroquia culé pero es así. El Manchester salió a merendarse al Barcelona y casi lo consigue tras un par de buenas jugadas de Park, Tévez, Evra e incluso una del desaparecido, dormido y desmotivado Ronaldo. O excesivamente motivado, quizá, da igual, el problema seguirá siendo el mismo, se anula a sí mismo en cada partido. Extraño fantasma persigue al portugués, fantasma, que ha de atrapar si no quiere caer en una frustración alarmante para su futuro como futbolista. Está muy bien golear al Reading, pero llegada la hora de la verdad no hay que apagarse. Messi no se apagó, ni Deco, y entre los dos tiraron hacia arriba de un Barcelona que se ahogaba en su poca capacidad de maniobra. El resto del segundo tiempo fue para lanzarlo al cubo de basura antes de pasar por la televisión. Un par de tiritos de Henry, que no hizo nada, otro par de Deco, alguno de Messi y ya no sé si recordar si otro de Iniesta. No importó, el Barcelona no marcó, ni con Bojan en el campo, al que 17 años le impidieron ser titular como tantas otras veces. Antes debería haber salido Bojan para hacer algo interesante frente a un Eto'o frustrado. El árbitro finalizó el encuentro con Valdés en el área de Edwin. Llorando (que vien valdría aquello de: No llores como una mujer lo que no has sabido defender como un hombre -palos feministas en comentarios, por favor-). Como Puyol. No sé muy bien hasta qué punto se hizo justicia, si con una temporada o con el juego mostrado en una eliminatoria. No sé hasta qué punto somos capaces los mortales, o los espectadores, de calibrar quién merecía más que el otro la final. Supongo que Scholes. Supongo que también Messi. Sea como sea da igual. Quien espera es el Manchester, y, en parte, gracias a anoche, el Barça no se maquillará y en verano se mostrará tal y como es, sin el espejismo de una final de Copa de Europa. Algo, casi más valioso que llegar a la misma final.

Vía | Más que Fútbol
Imagen | As, Marca, El País

Más que Fútbol ● 2008

20.45, semifinales (II)

Andrés Pérez | Y por último, Champions. Digo por último porque la final es otra cosa. Sigue siendo Copa de Europa, sí, el partido más importante, sí. Pero las elimintarorias a ida y vuelta, aquellas que nos vuelcan el corazón y dejan batallas épicas de por medio se acaban con las semifinales de esta noche. Y se podría decir que acaban de buen ver. Gracias, en gran medida, al buen hacer de los equipos ingleses durante la competición, buen hacer, mal acompañado por la presencia de la mayoría de los equipos teóricamente punteros. Sin noticias de los españoles, por mucho que el Barça esté en la semifinal engañosamente, sin noticias de los italianos que salvo la Roma, no supieron hacer frente ninguna eliminatoria y sin noticias de los alemanes, más allá de un rancio Schalke. Me hubiera gustado ver al Oporto en semifinales, probablemente en el sitio del Barcelona. Fatídica tanda de penaltys para los lusos frente al Schalke 04 en cuartos de final. Pero ahora no queda tiempo para lamentarse de una Champions de contrastes provocados por la brillantez y emoción inglesa y por el aburrimiento restante. Ahora, queda contemplar las semifinales.


Mañana juega el Barcelona frente al Manchester en Old Trafford. De él depende no contemplar una justísima final inglesa, pero no creo que lo consiga, he de decir. La ida se saldó con un apurado 0-0 para el Manchester, cierto, pero no es menos cierto que si comparamos el partido del Barcelona con los de Roma o Lyon descubrimos que el Manchester fuera de casa es así, defensivo. Matemáticas aparte, el Barça lo tiene difícil porque no tira a puerta. Con Deco en el campo dominan pero sin el Eto'o de antes, con un Ronaldinho más fuera que dentro y con Henry desaparecido, el Barcelona acusa una alarmante falta de pegada. Dos tiros a Van der Sar en la ida. No sé cuantos cosecharán esta noche en Old Trafford, pero lo que sí sé es que el Manchester no se querrá ir sin goles de Europa, o de su estadio. Si el Barça quiere estar en Moscú debería marcar dos o más goles mínimo. Y no lo veo nada claro.


El miércoles se juega un partido de pronóstico más complicado. El Chelsea lleva 82 partidos sin palmar en casa y acude con la ventaja del gol en propia meta de Riise en la ida, pero el Liverpool es el Liverpool y peores gestas le hemos visto conseguir a lo largo de su larga historia en competiciones europeas. 1-1 en Anfield, en teoría el Chelsea de un renacido Ballack, del gigante Drogba y de la defensa de hierro debería pasar a Moscú, pero el Liverpool juega mejor, es el Liverpool, cuenta con un cuarteto atacante letal (Gerrard, Babel, Kuyt y Torres) y con una pareja de mediocentros que hacen y deshacen a su antojo (Xabi Alonso y Mascherano). Probablemente el partido se decida en el mediocampo, mediocampo que el Chelsea desprecia. He ahí las esperanzas de un motivado Liverpool. Sin embargo, la motivación no lo es todo, y los números, las matemáticas y la lógica dicen que el Chelsea de Grant debería estar en la final. Pero, como todos sabemos, ni el Liverpool, ni la Copa de Europa entienden de números y lógica. Sólo de sueños.

Vía | Más que Fútbol
Imagen | As, Marca

Más que Fútbol ● 2008

lunes, 28 de abril de 2008

Y digo yo | Cola de espera para la Cibeles, Europa y el infierno


Juandi Mora | Las botellas de champagne siguen en la nevera, los panchitos sin abrir y la pasarela Cibeles sin ver desfilar a Raúl hacía la diosa. Parece ser que los trabajadores que preparaban la pantomima de la pasarela hacia la Cibeles no contaron con no ganar la Liga... y claro los leones tienen hambre, nadie piensa en los leones. La diosa seña del madridismo tendrá que guardar su vestidito de noche y quitarse el maquillaje para esperar a Raúl. El domingo irá. Lo bueno se hace esperar o eso dicen.

La cosa arriba tras el "paso" del Barça y la victoria del Villarreal está clarita, clarita. El Villareal no necesita reservar jugadores, y aun reservandolos tiene mejor "equipo B" que el club blaugrana. Es un equipo apañadito en el que ha cambiar un jugador por otro no se ve un cambio tan sustancial como en el Barça. Los Ezquerro, Gudjohnsen, Giovanni, Edmilson, bajo mi punto de vista no es banquillo para un campeón de Europa. Pero bueno ese no es el caso, se ha centrado en la Champions, como antes hicieron en la Copa del Rey. Están a dos partidos de ganar su tercera Copa de Europa (las mismas que tiene Guti) no solo para maquillar la temporada sino para que sea una de las más gloriosas de su historia. Tiene gracia la cosa.

La lucha bonita esta por la entrada en Europa donde cada vez hay más clubs con ganas de viajar. El Atlético me da miedo como siempre, sufre un mal de altura crónico. !Aguirre tiene la culpa! gritan en el Manzanares. No lo sé si la culpa es del mejicano pero espero, aun siendo madridista, que el Atlético se clasifique para la Champions, siendo cuarto. Si cae en la previa, seguirá siendo el pupas, contra eso no podemos hacer nada. Los demás candidatos están fuertes, Almería y Racing serían mis preferencias para la Uefa, pero Sevilla por nombre meterá la cabeza relegando a las revelaciones de la temporada.

Por abajo el drama sigue. El Zaragoza se hunde, pero parece que según la celebración del empate por parte de la afición, con flotador. No se que cuentas harán. La lucha clara esta con Recreativo y Osasuna. La siguiente jornada, el Madrid intentará cantar alirón en Pamplona, oportunidad de los otros dos equipos implicados para meter a los rojillos en el pozo y volver a depender, en el caso del Zaragoza, de si mismos. No pronostico nada. El forofismo zaragocista me nublaria la razón hasta el punto de verlos salvados, cosa que de momento si acabase así la liga sería imposible. Vuelvo a decir, veremos lo que pasa. Fútbol es fútbol. Yo mientras tanto, iré haciendo pronósticos para que cuando me equivoque ustedes me puedan echar a los leones... de la Cibeles, pero sin pasarela y con agua, por favor.

Vía | Más que Fútbol
Imagen | El Mundo

Más que Fútbol ● 2008

La espera segura y la espera insegura (Jornada 34)


Andrés Pérez | Para los que ganan, para los que pierden, para los que empatan y para los que miran desde el baquillo, grada, palco o salón de su casa. Para todos ellos la Liga se acaba y tan sólo queda esperar por su desenlace cada jornada, para bien, o para mal. Con la seguridad de tener el título en el bolsillo o con la inseguridad de no saber muy bien si el empate es válido o inválido. Polos opuestos lleva dejando el campeonato desde que se inició y ahora, no iba a ser menos. El Real Madrid, en un excelente arrebato de orgullo, trata de demostrar cada jornada que se sabe vencedor de la Liga, porqué es tal. Me explico, si hace cinco meses el Madrid jugaba a más bien nada y se dedicaba a contemplar como ganaba sin demasiado esfuerzo, ahora los blancos juegan como nunca y apabullan al rival. Esta vez a un buen pero no suficiente Bilbao. El Barcelona perdió 2-0 en Riazor y sería casi noticia si no fuera porque medio equipo clave (midiendo el alcance de esta palabra en un equipo deprimido) estaba en casa, descansando para la batalla del martes contra el Manchester. Por abajo todo lo contrario. La tranquilidad del Madrid se torna en inseguridad cuando el Zaragoza salta al campo, por mucho que el peor equipo de la segunda vuelta esté enfrente. 1-1 frente al Espanyol y a descenso de nuevo, para gloria de un resucitado Valencia y un ventajista , Recre, que venció 2-0 al Levante en casa.


El Recreativo - Levante alcanzaba la tarde del sábado ya con la seguridad de que no habría huelga por parte del Levante. Error o acierto, no se apreció el domingo, domingo negro (más todavía) ya que consumó su descenso a segunda. No fue una sorpresa y no aparecerá en los titulares, pero no deja de ser igual de dramático. El Levante es el ejemplo perfecto de toda la maldad, por decirlo suavemente, que rodea el fútbol español. Una directiva que sólo trata de sacar dinero se aprovecha de jugadores y afición para dejarlos sin cobrar y sin ilusión, sacando a cambio beneficios económicos que repercuten en dudosos beneficios morales. Dramas a un lado, el Recreativo aprovechó la situación para salir del descenso, aunque no muy lejos, a dos puntos. Dos puntos separan al resto del Zaragoza, equipo empeñado en salvar al resto a su costa. En Montjüic, empató cuando debió ganar y desaprovechó una vez más, una oportunidad para seguir soñando una semana más. El empate puede ser bueno si entendemos que el plan es ganar todo en casa, pero puede ser nefasto si tal plan no se consigue. El Valencia se aleja un poco con Voro vapuleando 3-0 a un Osasuna en problemas (vuelta de los exiliados inclusive), el Valladolid se escapa en el último minuto y el Getafe un poquito más cerca de salvarse.


La otra única gracia que tiene esta Liga es la Champions. Si se le puede llamar gracia al esperpéntico homenaje futolístico que están brindando Sevilla, Racing y Atlético. Perdonable por parte del Racing, cuyos iniciales objetivos eran metas más humildes, pero deleznable por parte de Atlético y Sevilla. Equipos en los que el dinero ha sido inyectado en dosis estremecedoras, desperdician jornada sí jornada también oportunidades para dictar sentencia y con un puñetazo en la mesa finalizar con el debate sobre quién debería ir a Europa y quién no. Es probable que toda la Liga se haya compinchado para que el Atlético vuelva a la Copa de Europa y no es menos probable que el único equipo que se empeñe en no ir sea el propio Atlético. Empató a uno en Getafe y gracias. El Sevilla, quien sabe porqué, empató a cero en Murcia y el Racing perdió frente al Mallorca del seleccionable Güiza. Seleccionable, 22 goles y en racha. ¿Debería ir a la Eurocopa? Yo creo que no, pero esa es otra historia.


Como historia es también la pelea por el título de Liga. Si la jornada que viene pierde el Villarreal, oficialmente el Madrid es campeón. Sin jugar ni falta que les hace. Ayer bañaron antes de tiempo al Bilbao en La Cibeles con goles de Saviola, que volvía a la vida tras una temporada (otra) en el infierno, Robben e Higuaín. Extraños hombres marcaron para el Bernabeú, que era una auténtica fiesta. El Villarreal ahogó anteriormente, concretamente a las siete de la tarde, el sueño real del alirón con un golazo de Senna desde el medio campo y con un repertorio de regates por parte de Mati Fernández. Me pergunto cuando explotará definitivamente el chaval, cuando lo haga, el Villarreal ganará algo. Equipo hay, falta la hechura de campeón que le sobraba al Barça. Digo sobraba, porque ahora en Liga cualquiera le mete mano. El Depor, mejor equipo de la segunda vuelta, que todo hay que decirlo, le meneó en Riazor para sacarle un 2-0 que aleja a los culés de la segunda plaza. No me extrañaría que los aficionados desearan una ronda previa de Champions para castigar tanta indolencia de los jugadores. La merecerían, aunque ayer perdieran los reservas y defenestrados durante toda la temporada. En definitiva, campeonato que muere con emoción por abajo y con una dulce espera para el Madrid por arriba. Como la Liga termina y opto por no creer en la realidad, nos (me) toca mirar a Europa, a sus semifinales. Y como llevamos una temporada más digna de un cuadro de Picasso que de uno de Velázquez, apuesto por una final Liverpool - Barça. Y que sea lo que el Dios del fútbol quiera.

Resultados |

Valencia 3 - 0 Osasuna
Espanyol 1 - 1 Zaragoza
Recreativo 2 - 0 Levante
Getafe 1 - 1 Atlético
Valladolid 1 - 0 Almería
Mallorca 3 - 1 Racing
Betis 0 - 1 Villarreal
Real Madrid 3 - 0 Athletic
Deportivo 2 - 0 Barcelona
Murcia 0 - 0 Sevilla

Clasificación | (pincha aquí)

Golazo de Senna desde el medio del campo:



Resumen del Real Madrid - Athletic Bilbao:



Vía | As, Marca, You Tube
Imagen | As, Marca

Más que Fútbol ● 2008

viernes, 25 de abril de 2008

En Liverpool no todos aprendieron a tocar la guitarra (V)

Andrés Pérez | Septiembre de 1978. El Liverpool se presenta ante el mundo como el equipo a batir, como la máquina europea que ese mismo año y el anterior se había proclamado campeona de Europa aún superando la marcha en 1977 de uno de los mejores jugadores del mundo: Kevin Keegan. Era otoño post-mundial. Probablemente tras el Mundial menos Mundial de la historia, el de Argentina 1978, el mismo al que Cruijff no se presentó con su Holanda finalista. Una Holanda, que perdió en la final ante la anfitriona Argentina de la dictadura de Videla. La victoria de Argentina permitió la llegada a Europa de Kempes, Villa, Ardiles y otros muchos. Entre tanto, un equipo llamaba poderosamente la atención: El Nottingham Forest. Campeón de la Liga Inglesa recién ascendido, iba a jugar en la Copa de Europa por primera vez. Nombres como Charlie George o Keegan sonaron en el verano del 78 para el precoz equipo, pero finalmente fue Trevor Francis quien arribó a la ciudad de Midlands Oriental por más de un millón de libras. El sorprendente precio lo justificó su entrenador, Brian Clough: "Es muy caro, pero nos devolverá lo que pagamos. Esta será una gran inversión para el club".


El Liverpool afrontaba la temporada 1978/1979 sin cambios estructurales importantes. Los de siempre seguían ahí. Dalglish, Neal, Hughes, Souness, Mc Dermott y compañía aspiraban a vencer por tercera vez consecutiva a revalidar el título como Campeones de Europa. En primera ronda el enfrentamiento no podía ser más evidente: Nottingham Forest. Los dos únicos equipos de Ingalterra en la competición tendrían que enfrentarse cara a cara en la primera ronda. Las aspiraciones inglesas se reducían a la mitad tan sólo en la primera ronda. La apuesta segura era el Liverpool, campeón intratable con un Anfield inexpugnable, pero el Nottingham Forest había vencido en la Liga Inglesa y si algún equipo conocía perfectamente las posibilidades del novato era el Liverpool, quien ya lo había sufrido el año anterior en Liga. A pesar de que el Nottingham Forest fuera el campeón inglés el Liverpool seguía siendo el Liverpool en Europa. Las tardes y noches de gloria no se olvidan tan fácilmente, se decían en Anfield y se lo tuvieron que repetir cuando en el partido de ida el Nottingham venció al Liverpool 2-0. Fue una sorpresa, pero todavía quedaba el infierno de Anfield, pensaron los aficionados reds. Nada de eso. El Liverpool no fue capaz de hacer ni siquiera un gol al Nottingham. Y eso que Trevor Francis no jugó por lesión.


Al Liverpool le sentó mal la resaca Europea pero se resarció de lo lindo en la temporada 1978/1979 de la Premier. Ganó la Liga con 8 puntos de diferencia frente al Nottingham Forest, en Anfield venció todos los partidos menos dos (con resultados escandalosos como un 7-0 al Tottenham) y comprobó el declive del Manchester United, noveno a 23 puntos del Liverpool. Poco le importó a los de Brian Clough no ganar la Liga cuando en 1979 se coronarían campeones de Europa tras una final inédita frente al Malmoe sueco. En Münich, un gol solitario de Trevor Francis sirvió para que las palabras de Clough sobre el valor de su fichaje fueran refutadas por toda Europa. El Nottingham era el campeón más precoz de la historia. De segunda a primera, del ascenso a ganar la Liga y de ganar la Liga a ganar la Copa de Europa. En tres años habían pasado del lodo de la segunda división inglesa a la gloria de la orejuda plateada. Vivir un sueño es eso, supongo.


Verano de 1979. Inocuo, sin competiciones futbolísticas de alcance. El Liverpool se sentía ofendido por el Forest y ese mismo año aspiraría de nuevo a la Copa de Europa. Un año tachado del calendario en competición europea y nada más. A seguir reinando, a destronar al Forest. Sin embargo, para desgracia del Liverpool, Europa cambiaba de aires. En Inglaterra equipos como el West Bromwich Albion y el Forest alcanzaban plazas europeas, en Alemania, el Hamburgo ponía fin a una década de reinado del Bayern Münich y del Borussia Mönchengladbach, en Brasil acababan con las tarjetas amarillas y EEUU seguía importando genios. Gerd Müller, cansado de la competición alemana, marchaba hacia el Fort Lauderdaler Strikes, junto a George Best. Nada parecía augurar en Europa un cambio de ciclo. Los ingleses eran temidos por todos y sólo un indolente Hamburgo parecía poder dar la sorpresa ante los de las islas. Equipos gloriosos antaño pero relegados a un segundo plano ahora, como el Madrid o el Ajax, buscaban volver a ser quienes fueron frente a tanto británico.


La temporada no empezó bien para los reds, a pesar de las buenas intenciones tras el fracaso anterior. Cuando llegó la hora de la verdad en Europa, frente a un presumiblemente débil Dinamo Tbilisi, marchaban octavos en la competición local y el Nottingham volvía a parecer infrenable. A pesar de que Francis se marchara temporalmente a la Liga americana para ganar más dinero. El Liverpool ganó 2-1 en Anfield y se marchó a Tbilisi con la seguridad de pasar de ronda. Demasiada seguridad pensaron más tarde. El Dinamo le endosó al Liverpool un escandaloso 3-0 que dejaba a los ingleses fuera de la Copa de Europa en primera ronda, otra vez. Y esta vez no era frente al futuro campeón, ni frente a un equipo local de una Liga competitiva. Era frente a un equipo soviético de Georgia. Demasiado ridículo. Demasiado daño a la afición del Liverpool. Eran tiempos oscuros ¿Suponía esta derrota el final definitivo de una era? La Liga decía lo contrario. En una campaña extrañísima el Liverpool volvió a proclamarse campeón con escasos dos puntos de diferencia frente a un recuperado United. Sin embargo no fue una Liga para lanzar cohetes, siete derrotas (todas ellas lejos de Anfield) y diez empates no eran motivo de honra a pesar de la victoria. Mientras tanto, en Europa, Baresi debutaba con el Inter, Cunnigham firmaba por el Real Madrid y el Forest, de nuevo, se proclamaba campeón de Europa.


El Forest se consagró como el heredero del Liverpool en Europa. Inglaterra estaba de enhorabuena pero en Liverpool miraban con desdén al Nottingham a pesar del batacazo de éste en la competición local, donde finalizó quinto a doce puntos del campeón, más centrado en la Copa de Europa que en la Liga. Por cierto, el Forest se impuso en la final al indolente Hamburgo que en un principio trataba de dar la sorpresa. De la mano del ex-red, Kevin Keegan, consiguieron darla pero no lo suficiente. Souness criticó ese mismo año al Forest: "Si nosotros jugásemos así en casa nos silbarían" en alusión al juego defensivo del Forest. Defensivos o no, eran los bicampeones y habían igualado a un equipo histórico en cuestión de tres años. El Liverpool necesitaba responder a esa afrenta, y lo terminaría haciendo.

Os dejo uno de los goles del Dinamo Tbilisi 3 - 0 Liverpool:



Y el gol de Trevor Francis al Malmoe que le dió su primera Copa de Europa al Nottingham Forest:



Otros reportajes | (I), (II), (III), (IV), El Nottingham Forest protagonista en Fiebre Maldini, Nottingham Dorest: Un histórico en el pozo, Reyes de Europa (Nottingham Forest, 1979, 1980)
Vía | 50 años de la Copa de Europa (As) (Fuente Escrita), Más que Fútbol, Zero Zero
Imagen | The reds, Britcorner, BBC, El Balón Digital, 4dsports

Más que Fútbol ● 2008

jueves, 24 de abril de 2008

Desde el fondo norte | Prohibido confiarse

Miguel Salazar | "¡Vamos Zaragoza que este año nos salvamos!" Miles de aficionados maños pensaron lo mismo tras terminar el encuentro del pasado sábado. Uno de esos partidos en los que, al finalizar, te sientes orgulloso de tu equipo. Y es que el Real Zaragoza vive una semana muy diferente a las anteriores y no sólo eso, sino que la situación, de una semana a otra, también es diferente. El equipo ya no se encuentra en descenso, descenso que ya no es cosa de dos sino de cinco...¿o de seis? Valladolid, Valencia y Osasuna se han metido en 'la pomada' junto a Zaragoza y Recreativo, y la jornada que viene, en caso de no puntuar, también lo hará el Getafe. Más candidatos para una sola plaza.


El sábado, además de conseguir los tres puntos, el equipo blanquiazul se ganó el respeto de los rivales. Todos perdieron, todos menos el Zaragoza que con una victoria por tres a cero logró salir del descenso y dar un toque de atención a los rivales directos en la lucha por la permanencia. El equipo volvió a ilusionar y los ánimos reaparecieron. Todo eran caras de alegría y satisfacción. Emociones que esperemos que se repitan el domingo en Montjuïc en el encuentro contra el Espanyol, que es tras el Murcia el peor equipo de la segunda vuelta, y que supondrían una gran inyección de moral para nuestro Real Zaragoza.

Vía | Más que Fútbol
Imagen | De archivo

Más que Fútbol ● 2008

Dejaron todo para la vuelta

Andrés Pérez | La ida de las semifinales nos dejó una curiosa o melancólica extraña sensación de vacío futbolístico. Un vacío que bien podría haber ocupado la Roma, o el Arsenal, equipos empeñados en hacer del fútbol un deporte de toque y versatilidad. Versatilidad es la palabra que deberían haber añadido a los dos partidos del martes y del miércoles respectivamente. Nada se decidió en la ida para colmo de males de Barça y Liverpool. Si vas a la vuelta fuera de casa con un empate y para colmo ese empate implica un gol en contra, puedes apostar a que tendrás muy cara la eliminatoria. Apostar, ese verbo tan peligroso, es lo que podríamos hacer por una final Manchester - Chelsea. Y no por méritos. Ayer jugó mejor el Barça y antes de ayer el Liverpool mereció más ante un Chelsea que confirmó lo que llevaba gritando toda la temporada. El mediocampo es un ente subestimado dentro del fútbol. Se puede jugar sin él, y se puede ganar.


Claro que esa filosofía es tremendamente acertada si el que está delante del medio campo es un futbolista como Drogba, a día de hoy el más fabuloso jugador de espaldas a la portería rival. Más allá de su pegada, de su técnica y de su poderosa capacidad de intimidación gracias a su cuerpo del ébano, Drogba tiene una inteligencia superior para practicar este deporte. Muchos africanos basan su potencia y su juego en lo físico combinado con algo de técnica, pero es complicado encontrr un africano tan inteligente en el campo como el marfileño. Cada movimiento es una acción de peligro y, Drogba, junto a Villa, Pato o Ibrahimovic es uno de esos jugadores capaces de sacar un gol de la nada, de pegarse más de ochenta minutos con toda la defensa para conseguir que en algún momento falle. El martes lo terminó consiguiendo aunque no interviniera directamente en la jugada tras 94 minutos de juego el Liverpool iba por delante en el marcador, tras un partido bueno, con un Xabi Alonso majestuoso para lo llamativo y para el trabajo sucio, con Kuyt corriendo de nuevo 300.000 kilómetros y con Gerrard y Torres en su habitual línea. El Chelsea despreció como lleva despreciando el mediocampo durante toda la temporada. Jugadores como Ballack, Malouda o Lampard deberían sentirse frustrados en un equipo como este. Y finalmente, Riise, cuando todo terminaba con un favorable 1-0 para los reds, se metió un gol en propia augurando un dificilísimo partido en Stamford Bridge.


Decía hace un par de días que es probable que el Barça haga tres partidos épicos y que gane la Copa de Europa. Sigo sin descaratarlo a pesar del 0-0 del Camp Nou. El Barça jugó su partido más digno en dos años, diría yo. Ante el Manchester y con la importante aportación de Deco (verdadera pieza clave de este equipo) dominó e intimidó durante buena parte del partido a un agazapado pero seguro United. Sin embargo, a pesar de los regates de Messi y el criterio de Deco el Barça tiró escasas dos veces a puerta. Y así, no se le gana a un equipo como el Manchester United. El Manchester por su parte se dedicó a esperar atrás y a pasar un par de apuros con su sólida defensa capitaneada por Ferdinand. Arriba, Rooney estuvo desaparecido, Tévez no se enteró de nada y Ronaldo hizo poco tras fallar el penalty. Curiosa debilidad mental la del portugués, fue fallar la pena máxima y desaparecer. El mito que le persigue y que dice de él que desaparece en los partidos grandes lo ha de derrumbar a la vuelta, en casa, en el Teatro de los sueños, contra un dominador pero poco peligroso Barcelona, que sin Eto'o en plena forma no encuentra referencia ofensiva más allá de la virtuosidad de Messi. Afortunadamente, no auguro una final Barcelona - Chelsea, principalmente por parte de los culés.

Vía | Más que Fútbol, As
Imagen | Marca, As

Más que Fútbol ● 2008

martes, 22 de abril de 2008

Breve autofelicitación duañística

Andrés Pérez | Hoy, 22 de Abril de 2008, Más que Fútbol cumple dos años desde que lo creara en un arrebato de actividad periodística con 16 años. Ya empezamos a hablar, llevamos cierto tiempo caminando y poco a poco dejamos de lado al independencia materna. Quitando lo tercero los paralelismos con los dos primeros son cuanto menos sorprendentes. Han sido dos años muy fructíferos, siempre bajo el estilo del blog, un estilo de post largos (lo sé) pero de posts de calidad. Nunca quise caer en los convencionalismos y nunca lo he hecho. Ahora, seguimos (plural que incluye a los colaboradores) siendo diferentes (o al menos lo creemos) y seguimos escribiendo con la ilusión de estudiantes de periodismo. Como podreis comprobar, este Abril, MQF ha tenido su máximo apogeo. Post diarios o casi diarios y tres colaboradores nuevos. Quisiera darle las gracias a Miguel, Eduardo y Juandi por ayudarme a hacer de Más que Fútbol un blog mejorado. Y por supuesto, daros las gracias a todos aquellos que nos leeís y nos comentais y a aquellos que nos leeis y no nos comentais (sé que hay muchos). Que sean otros dos. Que lo serán.

Más que Fútbol ● 2008

20.45, semifinales


Andrés Pérez | Cuando no te queda nada en la Liga, ni en la Copa ni siquiera en la recámara, te aferras al sueño europeo, en este caso, a Moscú. Aunque nadie crea en tí, ni siquiera tu propia afición, te quedará soñar y si hablamos de sueños hablamos de la Copa de Europa. Al Barcelona sólo le queda la utopía europea si pretende 'salvar' la temporada. A estas alturas ni aunque ganen la Copa de Europa la habrán salvado, porque, en caso de que la ganen, habrán sido simplemente tres partidos mágicos, gloriosos que no conseguirán ocultar una temporada mediocre (están en semifinales por unos cruces blandísimos) y salpicada de dramáticas despedidas como la de Ronaldinho. O la de Eto'o, delantero que está en las listas de todos los grandes tras declarar que si el Barça no gana títulos tendría que marcharse. Porbablemente el único jugador que puede decir eso en el Barça es Eto'o, porque es el único que ha demostrado querer ganar la Liga. Y lo ha demostrado con 14 goles en media temporada.

Pero ahora da igual. Por mucho que desde la prensa se empeñen en decir que altera el ritmo del vestuario, que no es adecuado a estas alturas y con el partido del Manchester a la vuelta de la esquina, no creo que las declaraciones de Eto'o dinamiten ya un vestuario volatilizado. A estas alturas al vestuario baulgrana sólo le queda la Champions y lo sabe. Si yo fuera jugador lo último que me preocuparía sería si Eto'o se quiere marchar o no, es su problema, no debería afectar al vestuario. Por eso el Barça en estos momentos estará conjurándose para evitar que los Rooney, Cristiano Ronaldo, Tévez y compañía acaben con ellos confirmando lo predecible: El Barça no está en teóricas condiciones de hacer frente dignamente al Manchester. Y menos con Ronaldo en el estado de forma en el que está, aunque, dicho esto, el Barcelona será Campeón de Europa, probablemente.


Hay vida más allá del Barça pero sólo la encontramos en las islas británicas, el mejor fútbol del mundo que mantiene su esencia. La demostración palpable de cómo los valores clásicos de este deporte son los que hacen que sea lo que es, marvilloso y apasionante. Deberíamos aprender en el resto de Europa. Los ingleses saben hacer las cosas bien y de no haber sido por un desafortunado (afortunados quienes lo vimos) cruce de cuartos entre Arsenal y Liverpool, hubieramos contado en semifinales con los cuatro equipos ingleses. Seguro. Un equipo inglés estará en la final. Otra vez. Y otra vez una semifinal entre el Liverpool y el Chelsea.

Los Liverpool - Chelsea en Europa van camino de convertirse en un clásico sólo comparable a los Bayern - Real Madrid (qué tiempos), si bien la rivalidad entre los dos primeros es menor que entre bávaros y españoles. En realidad, todo el morbo de las eliminatorias (tanto de Copas Inglesas como de Copa de Europa) lo ponía la relación Benítez - Mourinho. Ahora que Mourinho está de vacaciones el morbo del partido disminuye simplemente (que no es poco) al propio morbo de un espectáculo semejante al de las otras semifinales. Porque es la tercera vez que se enfrentan en semifinales y en las dos anteriores siempre pasó el Liverpool. Pero siempre lo hizo con Anfield detrás en el partido de vuelta. Esta vez el Chelsea viaja a Liverpool en la ida y espera en Londres en la vuelta. Visto lo de otras semifinales, el Chelsea ya tiene una batalla perdida. La psicológica. Mandaría narices que pasaran a la final ahora que se ha ido Mourinho...

Imagen | Mundo Deportivo
Vía | Más que Fútbol

Más que Fútbol ● 2008

lunes, 21 de abril de 2008

Y digo yo | Una escalera: unos suben otros bajan


Juandi Mora | Pasillo o no. Esa es la cuestión. Pasillo no lo sé. Pero lo que está claro es que el Barça esta construyendo una escalera, una escalera lo suficientemente alta para que Raúl llegue a la diosa Cibeles para ponerle la bufanda al cuello. Están aupando al Madrid en hombros, un Madrid que ya se ve campeón. Mientras que los perseguidores del Madrid aupan al líder como lo hace un padre con su hija pequeña en la cabalgata de los Reyes Magos, la cosa por la cola está calentita. Calentita en algunos sitios y ardiendo (y echándole más leña si cabe) en otros. Koeman esta recordando los tulipanes, Wembley , el Dream Team y hasta el cocido de su madre.

Deben de aprender en Valencia que ir de Copas no arregla todo y que la resaca es lo peor, sobretodo si el día siguiente la cosa sigue igual. Pero no solo por Valencia la cosa esta malita, Clemente tiene una neumonía de mil pares de narices. En el autobús ese que pone él debe de haber corriente porque la enfermedad del Murcia parece no tener solución y menos cuando ataca un virus llamado Güiza. El Getafe aún padece el síndrome de la Frankfurt en mal estado y parece que no levanta cabeza. En Valladolid la cosa no esta mucho mejor, en el Pisuerga ven el abismo muy cerquita y en Pamplona ven los toros, y queda mucho para San Fermín.

El Zaragoza me dio una alegría. Vibré en el campo y lo recordaré, sobretodo si se salva. Ganó a un Recreativo que salvo Martins y un talentoso Sinama Pongolle es equipo de Segunda División. Antes de despedirme, no sin el dolor de mi corazón, hasta el lunes que viene, diré un Olé! Por el Levante, y por el Almeria otro igualmente sonoro. Y diré ánimo a Luís Aragonés, ya falta menos buen hombre para la Eurocopa. Gol de Raúl, ya son ganas de fastidiar. Y ahora con seriedad, un ánimo de los grandes para el elegante Francesco, animo futbolista.

Imagen | El País
Vía | Más que Fútbol, As

Más que Fútbol ● 2008

domingo, 20 de abril de 2008

Por abajo se encomiendan al honor (Jornada 33)


Andrés Pérez | La muerte poco a poco acecha al campeonato aunque algunos sospechamos si por arriba murió hace bastante tiempo, cuando al Barça se le lesionaron Eto'o y Messi casi sin tiempo para llorar su pérdida y su lamentable falta de juego y motivación. Ahora, a seis jornadas del final, el Madrid se va a los diez puntos del Villarreal y a los once del Barcelona, que empató o pasó la tarde contemplando a un Espanyol también moribundo, lo cual viene a ser lo mismo. Los de la capital vencieron en Santander y el Villarreal hundió al Valladolid de nuevo en la pelea por la supervivencia, que a día de hoy es lo único interesante de la Liga ya que por arriba está todo decidido. Aunque mención especial merecería la pelea por la Champions, la lamentabilidad de los tres equipos que la porfían hace que la mención especial se transforme en un espejo (otro más) de las carencias de la Liga Española. El Sevilla palmó con un escandaloso 1-4 en casa frente al Almería, el Atlético se dejó ganar 1-3 ante el Betis y el Racing 0-2 frente al teóricamente campeón. Por abajo el Zaragoza asusta al resto, resto que se hunde poco a poco en el lodo, ejemplificado en el Valencia de Koeman. 5-1 en Bilbao.


Y es que el Real Zaragoza no se rindió. Los jugadores saltaron al campo con un doce dorado bordado en el escudo y la importancia del doce cobró su valor. Doce por la afición que no paró de animar, doce por los dos goles de Oliveira y doce por los jugadores de primer nivel con los que el Zaragoza contaba ayer. Acabó jugando con Vicente y Chus Herrero, el primero un canterano desconocido y el segundo otro tristemente conocido. 3-0 para los maños comandados en la primera parte por un magnífico Aimar (digan lo que digan no sólo juega como el mejor sino que lucha como el más apasionado) ante un Recreativo que se dejó la salvación en el feudo zaragozano. Peligrosas aguas sigue cursando el Zaragoza pero gracias a encomendarse al honor, este fin de semana consiguió hundir un poquito más a todos los que tratan de sobrevivir. Entre ese todos deberíamos incluir al Valencia aunque duela. Oficialmente es serio candidato al descenso tras palmar escandalosamente ante un buen pero no tan buen Bilbao. 5-1 y Koeman probablemente a la calle (es posible que mientras lean estas líneas habrá sido ya destituido).


El Valladolid sigue abajo tras perder con el Villarreal, el Osasuna no se aleja a costa de un buen Deportivo, el Betis certifica su salvación y el que no se rinde es el Levante. 3-1 le endosó al deprimido Getafe. Repito lo de cada post-jornada, los jugadores del Levante se encomendaron al honor y merecen un monumento. Se fue De Biasi, el auténtico propagador de la gesta y mantienen el orgullo bien alto. No conozco el dato pero es probable que el Levante estuviera lejos del descenso si sólo se contabilizara la segunda vuelta. El Getafe no debería descuidarse, tiene 41 puntos y un par de malos partidos le meten abajo, como al Osasuna, 40. El que se hunde sin remedio y el que se salva seguro son el Murcia y el Mallorca respectivamente. 1-4 y Güiza 20 goles.


Y por arriba... El deshonor. Si por abajo se encomiendan al honor arriba lo desprecian, lo mastican y lo escupen a la cara de las aficiones. Sólo dos equipos se salvan de tal despilfarro de calidad, el Real Madrid (paradoja tremenda que el equipo que menos calidad tenga sea el que más lo aparente) y el Racing. Ni siquiera salvo al Villarreal, equipo que sólo es fiable en casa. El Barcelona volvió a dar otra demostración de torpeza y vagancia empatando en casa a cero ante un Espanyol en auténtico declive. Viendo a los pericos en la segunda vuelta sería recomendable pensar si la primera fue un espejismo o bien la novia o la mujer les ha dejado de repente a todos. Inexplicable, ahora Riera parece malo. 0-0 y pañolada contra Laporta. Deberían lanzársela a los jugadores, aunque a Laporta no le vendría mal para dejar de abrir la boca. En el Calderón lo mismo, Atlético no juega, Atlético se duerme, rival lo espabila a goles, Agüero hace algo pero el equipo sigue igual, Atlético pierde ocasión única, Aguirre y Cerezo se llevan la bronca. Por su parte el Sevilla aplicó de nuevo aquello de: "No, ve tu a Europa que a mí me da la risa" y se dejó ganar, o más bien, le endosaron cuatro goles en su campo. No fue otro más que el genial Almería de Emery. Si se nacionaliza... ¿Melo es seleccionable? Hoy por hoy es el mejor mediocentro de la Liga. El Madrid le ganó 0-2 a otro aspirante a la Champions, sentenció la Liga y visto lo de la plaza de Champions yo opto por regalársela al Almería o al Levante. Ellos si la merecen.

Resultados |

Murcia 1 - 4 Mallorca
Osasuna 0 - 1 Deportivo
Levante 3 - 1 Getafe
Villarreal 2 - 0 Valladolid
Racing 0 - 2 Real Madrid
Athletic 5 - 1 Valencia
Barcelona 0 - 0 Espanyol
Zaragoza 3 - 0 Recreativo
Atlético 1 - 3 Betis
Sevilla 1 - 4 Almería

Clasificaciones | (pincha aquí)

Sevilla 0 - 4 Almería:



Real Zaragoza 3 - 0 Recreativo:



Imagen | Marca
Vía | As, Marca, Más que Fútbol, You Tube

Más que Fútbol ● 2008

viernes, 18 de abril de 2008

Tirando a dar | Yo soy un Ronaldinho

Eduardo Lázaro | Lo más lógico quizá hubiese sido tratar la reciente final de la Copa de SM El Rey o la triste eliminación del Getafe en la Copa de la UEFA; pero no, yo no colaboro en Más que Fútbol para eso. Las crónicas no son cosa mía. Yo escribo una vez a la semana, y hoy voy a remontarme una semana atrás. Antes incluso de mi primera colaboración en este blog. El miércoles de la semana pasada saltó la noticia de que un 'mandamás' del Barcelona se había ido de la lengua desenmascarando las supuestas lesiones de Ronaldinho o Deco. No existían según el señor Sala Martín tales lesiones. Eran meras excusas para castigar la supuesta vida licenciosa de ambos compadres. Cojonuda la apreciación de este señor. Me quito el sombrero. ¡Bravo!.

Hasta ahora todos los mortales creíamos que los futbolistas hacían vida monacal. No salían de fiesta, guardaban celibato y los domingos antes del partido el club llevaba un capellán a la concentración para celebrar la Sagrada Eucaristía. Gracias a sus declaraciones hoy ya somos un poco más cultos, ya entendemos un poco más del mundo del fútbol. Ya sabemos que Ronaldinho y Deco la lían parda en la noche de la ciudad condal. Que se beben algún cubalibre que otro y que probablemente más de una madrugada hubieran detonado el alcoholímetro si los hubiera parado la guardia urbana (Mossos d’esquadra, perdón, corrección ante todo). De ahí se deduce que ni Iniesta, ni Xavi, ni Puyol, ni la madre que parió al segundo utillero salen de fiesta bajo ningún concepto. Por supuesto tampoco lo hacen los futbolistas de cualquier otra plantilla puesto que no están ni apartados, ni supuestamente lesionados, ni leches. ¿Quién en su sano juicio cree que por muy futbolistas que sean, viviendo en la veintena su mayoría, se quedan en casa viendo la carta de ajuste? Seamos serios, por favor.


Ya vale de esconder la verdad, ya vale de poner paños calientes, ya vale de llover sobre mojado. La culpa la tienen ustedes. Sí, ustedes. Los que manejan los hilos de estas marionetas vestidas de futbolistas con un escudo en el pecho que en muchos casos ni sienten, ni entienden, ni quieren hacerlo. Si un servidor, estudiante en la actualidad de periodismo, recibiese un sueldo multimillonario (y multimillonario en euros, que no es moco de pavo) por el mero hecho de estudiar, que es mi “trabajo” y mi obligación independientemente de los resultados que obtuviera en las evaluaciones; ¿qué motivación tendría para dejarme los sesos de cara a los exámenes sabiendo que voy a cobrar los haga bien o los haga mal?. Efectivamente, los hay honrados y primero atenderían a su obligación y después disfrutarían ese dinero con tanto esfuerzo y ahínco ganado. Efectivamente yo soy un Ronaldhino. Díganme vago, jeta o caradura. Me da igual. Yo, sabiéndome cubierto de por vida con millones y millones en mi cuenta corriente me juntaría con los Decos de la clase. Y me iría de fiesta. Y me pasaría por el arco del triunfo las indicaciones del profesor y de quien se pusiera por delante. Y seguiría engordando mis arcas poniendo mis nalgas en el pupitre. Y saldría de clase para irme a hacer cuatro fotografías para un anuncio y malgastaría por ahí la gasolina de mi ¿Ferrari?, ¿Bentley?, ¿BMW con apellido M? (elijan o añadan la marca que más rabia les de).

Pues sí, así soy yo. O mejor dicho, así desgraciadamente no soy yo (que ya no sé lo que es mejor), pero lo sería. Si me ponen un caramelo delante y me resuelven la vida a tan temprana edad… ¿porqué no beberla a grandes tragos?. Acabaría calentando el asiento de diferentes universidades hasta el día que dijera basta. Me retiro. Y por si no he disfrutado poco aún lo voy a hacer más. Ahora sustituyan universidades, pupitres y profesores por clubes, banquillos, entrenadores, etc. La metáfora creo que es muy sencilla.


Señores del fútbol, no sé en qué día exacto comenzaron a supravalorar la vida y el esfuerzo del futbolista. Yo ya no sé nada, no sé ni lo que escribo. Sólo se que ustedes van a seguir poniendo la miel en los labios de aquellos que por gracia de la providencia tienen dos piernas hábiles para la práctica de este sacro deporte. Y van a seguir fabricando juguetes rotos. O juguetes que se romperán cuando vean (como ya han hecho muchos en la historia reciente del fútbol) que la vida no es sólo correr tras un balón y que con “perras” en los bolsillos se vive de cojón siguiendo el ejemplo de los que lo han hecho antes. Sigan pagándoles mientras se ríen en su cara, en la de la afición y en el propio escudo. Y sí, alguno honrado quedará, alguno de la casa quizá… pero la tendencia es acortar cada vez más la carrera en la élite para hacer todavía más fortuna arrastrándose de mala gana por los estadios de países como Qatar, EEUU o cualquier otro lugar donde los escudos de los equipos lleven un billete implícito.

Mientras, yo seguiré con mi vida, creciendo, estudiando, trabajando. Veré generaciones y generaciones de futbolistas, si Dios quiere hasta el día que deje este mundo. Pero con el paso de los años estoy seguro de que el fútbol va a perder ese sabor añejo de las grandes gestas (si es que no lo ha perdido ya), de las noches épicas en las que los sueños, la garra y la ambición se funden y vibran al mismo son, al son de los cánticos de la grada. Será una lastima ese día en el que los torneos de altos vuelos se conviertan en reuniones de 22 hombres engominados que se juntan para, sin despeinarse mucho, entretener a unos cuántos idiotas que aún sienten cariño por unos colores. Sí, una lástima. Verdaderamente. Para todos los Ronaldinhos y Decos que infestan el fútbol. Si no tenéis ganas de trabajar no lo hagáis, pero por lo menos no os riáis de quien os da de comer. So cabrones.

Vía | Más que Fútbol
Imagen | De archivo

Más que Fútbol ● 2008