lunes, 30 de agosto de 2010

No disparen, aún, al pianista


Andrés Pérez | El Madrid es un equipo que vive en un constante vaivén de opiniones viscerales normalmente alejadas de todo punto de crítica racional. O se le ama o se le odia. El término medio es un indeseable punto de cordura inaceptable. En ese sentido, cabía imaginar que la llegada de Mourinho al banquillo blanco provocara a partes iguales reacciones eufóricas e iracundas. Así pues, llegado el primer partido de Liga y demostrado que el Madrid aún tiene que mejorar todos los aspectos del juego que durante el año pasado le llevaron a fracasar en tres competiciones, las alarmas se han disparado habida cuenta, además, del buen nivel mostrado por el Barcelona ante el Racing de Santander.

Es cierto que el Real Madrid arrastra serias carencias en la circulación y en la capacidad de funcionar como un bloque, pero aún así la temporada es larga y de la noche a la mañana, un entrenador, por más Mourinho que sea, no es capaz de reformar todas las líneas de un equipo que incorpora a un nuevo jugador en cada una de ellas. El proceso de encaje de los nuevos jugadores y de las nuevas ideas del entrenador lleva su tiempo y es relativamente normal y comprensible que en la primera jornada, aún cuando la máquina no está engrasada, las ideas apelmazadas por el calor y los jugadores mirándose de forma extraña ante una presencia desconocida de su mismo color, el juego sea anodino y soporífero.

No por ello se deberían disparar las alarmas. Los proyectos en el fútbol moderno se crean, o al menos se deberían crear, a largo plazo. Mourinho es un entrenador inteligente y capaz que probablemente mejorará lo presentado ante el Mallorca. En cualquier caso el radicalismo se impondrá desde las portadas de los grandes diarios y en los mentideros futbolísticos de la red. El Madrid sigue teniendo suficientes mimbres para afrontar una lucha de igual a igual frente al Barcelona. Sucede que en ese proceso de costura, es posible que haya lagunas durante un par de meses. No en vano, Guardiola y el equipo que ese mismo año ganaría todo lo jugable comenzó perdiendo en un campo tan inocente como Los Pajaritos de Soria.

Lectura recomendada | Mourinho se topa con Aouate (Diego Torres en El País)
Imagen | Qué

miércoles, 25 de agosto de 2010

La no clasificación del Sevilla no es un drama

Andrés Pérez | Y el titular ha de entenderse como una frase pronunciada por un espectador ajeno al sevillismo y subjetivamente honesto —siempre he detestado el término objetividad—. Esto es: para el aficionado del Sevilla, como es lógico, la derrota sufrida en la Supercopa de España y la eliminación posterior con dos derrotas ante un equipo de perfil muy bajo para la competición europea son dos batacazos sentimentales de altura. Sucede, sin embargo, que ambos hechos son consecuencia lógica de una realidad algo menos edulcorada de lo que se creía.

Primero los honores: el Sevilla es un grandísimo equipo que representa el buen hacer y el crecimiento escalón a escalón conjugando sabiamente la labor de la cantera y unos recursos económicos limitados pero increíblemente bien utilizados. Todo equipo de mitad de tabla hacia abajo que se precie debería fijarse en el Sevilla e intentar seguir su estela. Del pozo de Segunda y de una remota Liga prácticamente olvidada en el imaginario colectivo, el Sevilla pasó a llevarse dos Copas del Rey, dos Uefas, una Supercopa de Europa y otra de España. Es un palmarés espectacular y conseguido en un muy escaso margen de tiempo. Tan corto, que muchos jugadores, el bloque, la médula espinal, han estado presentes en todos y cada uno de ellos.

Además el Sevilla ha sabido vender bien y reinventarse. Las marchas de Sergio Ramos y Baptista parecían una losa. No lo fueron. La venta de Alves o Keita podían hacer desvanecer el empuje del conjunto: no lo hicieron parcialmente. En suma, una gestión excelente. Una vez recordado todo esto, cabe decir que el Sevilla no es un equipo que esté en la primera línea de la Champions League y su ausencia apenas será recordada como un factor sorpresivo para el resto de candidatos. A pesar de lo que Del Nido dijera el año pasado, el Sevilla nunca fue candidato potencial a alzarse con el trofeo continental.

Muy lejos de aquello quea ahora la realidad del Sevilla. A pesar de su buen hacer, el Sevilla sigue siendo un equipo incapaz de luchar por un título de más altas miras como la Liga y la Copa de Europa. La primera es coto privado de dos clubes, la segunda es un cetro inalcanzable habida cuenta del nivel de los conjuntos extranjeros candidatos al título. Así las cosas, el Sevilla haría bien en resignarse nada infelizmente a la Copa del Rey y a un título que puede ser apreciado menor como la Europa League, pero que no lo es. Centrado en la competición menor del fútbol europeo es más peligroso que desvivido en la Copa de Europa. Más aún: la afición disfrutará más la ilusión de alzar un nuevo título y seguir haciendo historia que un hipotético pase a los cuartos de final. Así que no. La no clasificación del Sevilla para la Champions League no es ningún drama.

Lectura recomendada | Batacazo del Sevilla (El País)
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lunes, 23 de agosto de 2010

El fútbol, Hangeland, el romanticismo

Andrés Pérez | Brede Hangeland es un tipo alto y desgarbado, de complexión endomórfica, rubio, y, se mire por donde se mire a primera vista, desde luego no la imagen idílica de un futbolística. Sus carencias técnicas son evidentes y se siente inseguro con el manejo del balón. Hangeland, noruego nacido en Estados Unidos, en Houston, es un defensa de empuje y despeje: lo suyo es ser expeditivo. No reúne ningún requisito particular por el que amarle en el ejercicio de su profesión ni por el que pasará a la historia. De momento.

Hangeland es uno de tantos. Está bien, su aspecto es especial, tiene una mirada inquieta y áspera, quizá alicaída, melancólica. En fin, es noruego, no son tipos efusivos. Pero, a fin de cuentas, Hangeland es otro central más, uno de tantos que honradamente trabaja cada fin de semana en los duros campos de la Premier League esperando que su contrato sea renovado, anhelando que Drogba o Rooney no tengan el día, volviendo a casa felizmente, saboreando la gustosa nula exposición mediática con su familia, probables hijos, novia, mascota o, simplemente, con cualquier amigo por fortuito que sea.

Cuando a mediados de al segunda parte Nani botó un córner y Hangeland empujó el balón con la espinilla hacia la red de su propio equipo, el Fulham, un coqueto y pequeño club del centro de Londres que viste la casaca de local en uno de los estadios más románticos que se imaginan, el mundo, al noruego, se le venía encima. Tras un partido espectacular, puramente inglés, e intenso, el Fulham caía víctima de una jugada fatal en la que su rival apenas hizo gran cosa por adelantarse. Caer por un gol en propia siempre es doblemente dramático y peripatético: ni siquiera se obliga al rival a ser mejor que uno mismo.

Por aquel entocnes Hangeland era la víctima. Al rato, el fútbol, una fuente inagotable de injusticia pero, de vez en cuando, gustosa en otorgar dosis de romanticismo a cuentagotas, premió, casualidad o causalidad, quién sabe, a Hangeland. En otro córner, cerrando el círculo de esta historia, Hangeland aprovechó su altura y aspecto desgarbado para empujar la pelota a la red. Empataba el Fulham y Hangeland lo celebraba pausadamente, en frío, asumiendo que era su cometido y el de nadie más. El Fulham empató. Quienes vieran el partido se emocionarían. Hangeland simplemente, saboreó en diez minutos las mieles del éxito y del fracaso.

El fútbol ha vuelto. Las últimas gotas de romanticismo en el deporte, con él.

Imagen | RTVE

lunes, 9 de agosto de 2010

Amaños en tierra de nadie

Andrés Pérez | A pesar del silencio cómplice de los medios de comunicación, muy ocupados hablando de los apasionantes, sin duda, partidos de pretemporada de los clubes españoles —hoy, por ejemplo, en El País no encontramos ningún reportaje ni noticia relacionada con el caso Brugal y el Hércules, y ni qué decir de Marca, As, Sport y otros medios, a pesar de la editorial de ayer de Relaño—, el asunto de los partidos amañados por Enrique Ortiz sigue su curso y sigue dando de que hablar.

Hace poco supimos que las declaraciones de Tote en las que afirmaba no tener nada que ver con el asunto de la compra-venta de partidos podrían ser falsas. Frente a la prensa, Tote dice que él no sabe nada. Al teléfono, hablando con su amigo y presidente Enrique Ortiz, Tote se expresa en otros términos:

Tote: ¿Qué pasa?

Ortiz: ¿Qué pasa tío?

Tote: Ya lo ves. Esto es así tío. ¿Has visto lo que tenían los demás?

Ortiz: Hombre, estos estaban primados todos.

Tote: No, no, primados no, escúchame, 300.000 [euros], 25.000 cada uno [de los jugadores], de los cuatro [equipos] de arriba. Eso para que digas que no sueltan pasta. Esto es la guerra monstruo.

Ortiz: ¿Y empatando les pagan?

Tote: La mitad. (...)

Ortiz: ¡Qué hijos de puta! (...) Bueno, no podemos fallar el próximo tiro (...) Allí tienes, allí tienes amigos, ¿no?

Tote: Sí. Lo que pasa es que yo no voy, tengo la tarjeta, este hijo de puta [por el árbitro] me ha sacado una tarjeta hoy. Pero ya lo hablaremos por otro lado.

Ortiz: No, es igual, aunque no vayas, vas.

Tote: Pero puedo encargar, lo puedo a encargar a Abraham [el segundo capitán del equipo], no hay problemas, ya hablamos esta semana.

Ortiz: No, no, no, pero haz cuenta que te vas para allá, tú y yo, los dos. ¿Van en avión, no?

Tote: Sí.

Ortiz: Pues cuenta, no te organices que nos vamos tú y yo para allá.

Tote: Bueno, vamos hablando, tranquilo.

Ortiz: Habla todo lo que tengas que hablar y aprieta, ¿vale?

Tote: Venga.

Las conversaciones publicadas por El País durante la semana pasada revelan algo que hasta el momento sólo se intuía: los jugadores, más allá de dejarse comprar por cuatro euros, participan de forma activa en la trama. Contactan con su presidente, analizan el precio de mercado que imponen otros equipos y utilizan los hilos de viejas amistades y compañías en el vestuario para alterar la competición. En fin, ya lo ven, Tote, aun pudiendo disfrutar de un día libre, prefiere acompañar a Enrique Ortiz para negociar in situ los pormenores del trato.

A pesar de las pruebas, el juez de Instrucción del juzgado número 7 de Alicante, el encargado de instruir las diligencias del caso, ha decidido no trasladar la causa a la justicia deportiva, esto es, al CSD y a la RFEF. El argumento para frenar en seco el proceso judicial es el de que, al ser conseguidas las conversaciones durante la investigación de un caso ajeno al fraude deportivo, el caso Brugal, pierden su validez ya que la legalidad de las escuchas no abarcaban ese ámbito, en teoría privado. Una excusa de mal pagador, un vericueto judicial que el juez, al que imagino vistiendo la camiseta de Farinós, utiliza para frenar la investigación.

De momento el CSD y la RFEF tienen la excusa perfecta para mantener la boca cerrada y no actuar: la justicia ordinaria no les transfiere el caso, ellos más no pueden hacer. En cualquier caso la Abogacía del Estado y la Fiscalía han recurrido la decisión del juez por lo que aún quedan posibilidades de que el asunto llegue a manos de los órganos deportivos y puedan, si consiguen demostrarlo —y si deciden procesarlo— sancionar el fraude.

No desesperen, quizá, si alguien se encarga de recordarlo, e intuyo que el Betis tomará ese camino, el 22 de diciembre se reabra un caso ahora paralizado: ese día el fraude deportivo se considerará delito, por lo que no será necesario derivar la causa a un organismo deportivo, acelerando el proceso judicial. Hasta entonces, los amaños seguirán en tierra de nadie. Como siempre.

Eso sí, tampoco tengan puestas demasiadas esperanzas. Miren, hoy, verano de 2010, año y medio después, qué sucedió con las declaraciones de Jesuli en las que primero afirmaba haberse recibido dinero para dejarse ganar por el Málaga para posteriormente desdecirse:

La federación abrió un expediente informativo, como tantos otros (nunca se ha sancionado un hecho de este tipo), y decidió enviar la documentación a la Fiscalía General del Estado, quien a su vez trasladó el expediente a la Fiscalía de Málaga por haberse producido los hechos en dicha ciudad, lo que no dio resultado porque el caso fue archivado.

Poncio Pilatos no se habría lavado las manos de mejor modo. La actitud de la Fiscalía, ahora con el caso Hércules, parece por tanto algo impostada: si en su día decidió hacer caso omiso de un futbolista que primero afirmó haber participado en un fraude deportivo y luego afirmó haber mentido es de extrañar que hoy muestre tan notable entusiasmo por buscarle las cosquillas al Hércules y a Enrique Ortiz. Mucho menos rédito merece la RFEF, que jamás ha sancionado a nadie por afirmar o dejar entrever que se ha dejado perder a cambio de una prima.

Por si acaso, el Hércules ya se ha personado en el caso para defender el honor de Enrique Ortiz, lo cual parece un gracioso oxímoron. España funciona así. Sus gentes, también. El fútbol es algo demasiado importante como para dejarlo en manos de todos estos mangantes, pero siempre habrá aficionados, o supuestos periodistas, fanáticos y ciegos ante la realidad. ¿Mi equipo? Intocable. Me dan igual las pruebas, otros son peores. Vomitivo:

(...) sospecho que hay 'caso Hércules' para rato. No digo que vaya a ser por culpa de la Fiscalía y de la Abogacía del Estado, pero ambos organismos están mostrando un interés extraordinario para que las grabaciones que implicarían al presidente del Hércules (...)

El fiscal jefe de la provincia, Juan Carlos López Coig, sostiene, entre otras cosas, que es inconstitucional no perseguir el 'fraude' del Hércules y que «lo que protege la norma constitucional es la comunicación y no lo comunicado». ¿Acaso no es inconstitucional tener más de cuatro millones de parados? ¿Es constitucional que miles de españoles carezcan de una vivienda digna? ¿Llevarán la Fiscalía y la Abogacía del Estado a los tribunales al Gobierno por los parados y los sin techo?

Como ven, el argumento principal de Ramón Gómez Carrión no es la inocencia de su amado equipo, sino un defecto de forma. No dice demasiado en favor del nada sospechoso Enrique Ortiz y del Hércules que sus defensores opten por resaltar la maldad de quien procesa y no la bondad del procesado. ¿Y qué dicen los jugadores? Abraham Paz, por ejemplo, no defiende la inocencia de su persona y de su club. Más bien al contrario.

Si el CSD empieza a investigar, acataremos su decisión pero habría que investigar quince años para atrás y ver cómo subieron los equipos de la pasada temporada, la de la otra o investigar todos los partidos de la última jornada de la Segunda División de la última temporada, porque a los treinta minutos había muchos equipos ganando tres y cuatro a cero. Eso hay que analizarlo también.

"Hemos hecho trampas, vale, pero ellos más. Así que no somos culpables". Así son los pozos del fútbol español —y su nivel intelectual—, y lo que nos queda por conocer. Por cierto, los amaños del Hércules se remontan, supuestamente, eso siempre, a dos años antes de esta temporada. Otra chiquillada, imagino, sin importancia que no merece empañar el impecable aspecto de nuestro fútbol, blanco nuclear, impoluto. Tan refulgente que hay que mirarlo con gafas de sol. Como en los funerales.

La corrupción del fútbol en Más que Fútbol | Otro caso de partidos amañados, pero aquí no pasa nada | Que el espectáculo no pare | Un deporte de caballeros practicado por villanos | Noticiario fúnebre
Lectura recomendada | El Hércules se persona en la causa del Brugal por el presunto amaño de partidos en Segunda (El Mundo) | "Sin dar primas, jugamos otra liga" (El País) | Fútbol de compra y venta (El País)
Imagen | Blogdeporte | As

jueves, 5 de agosto de 2010

Autobombo barato

Andrés Pérez | Cada cierto tiempo, Wikio, una página que almacena y ordena contenidos generados en más de treinta mil blogs del mundo cibernético español, publica un ránking de relevancia de todos los blogs en español, o casi todos. Entre las múltiples secciones, Wikio tiene una reservada a los blogs de fútbol, auténtico fenómeno social que durante los últimos años han proliferado como setas en Internet. Hay un montón y muchos de ellos son de altísima calidad, demostrando que, lejos de morir, el periodismo deportivo está, simplemente, en las manos equivocadas.

En fin, que tras tres meses de ascenso continuado, este humilde blog, bastante veterano, inconstante y en continua evolución, cuatro años ya a sus espaldas, se ha colocado en el top 20 de blogs de fútbol en el Ránking Wikio. No suelo preocuparme por las visitas, comentarios o ránkings, pero siempre hace ilusión. Al mismo tiempo, está en el puesto 38 de blogs deportivos. Y este post, aunque también sea autobombo barato, no es más que un modo de agradecer a todos los lectores que se pasan habitualmente por el blog o que se han pasado alguna vez. La situación obliga: puede que el mes que viene, o el año que viene, este blog se sitúe por debajo del cien, doscientos o trescientos.

Nunca se sabe. Por eso, gracias.

1) Notas de futbol
2) La Libreta de Van Gaal
3) Diarios de Futbol
4) Dibuje maestro
5) Futbol Real
6) LigaFutbol.net
7) Café Fútbol
8) Jesus Alvarado
9) Foro Azulgrana/Blaugrana
10) MaTA-dor
11) Latidos de Nervión
12) Tic Espor
13) Actualidad Futbol
14) Zona Culé
15) Valencia y che
16) Uno o dos toques
17) Mundial Futbol - 2010
18) El taliban sevillista
19) La Palanga Mecánica
20) Más que Fútbol

Ranking generado por Wikio

martes, 3 de agosto de 2010

Otro caso de partidos amañados, pero aquí no pasa nada

Andrés Pérez | Ya está, aquí lo tienen: un nuevo escándalo en el fútbol español por un presunto amaño de partidos. Que el silencio imperante desde todos los estamentos conocidos del fútbol español no les lleve al engaño, vuelve a ser un pequeño borrón que, de actuar como suele hacerlo al RFEF, no llegará a ninguna parte. Como sucediera con el caso Jesuli y el supuesto ascenso fraudulento del Málaga en la temporada 2007/2008, todo lo que sabemos hasta la fecha es por escuchas al presidente de uno de los clubes implicados, aunque, en este caso, el protagonista no es indirecto, sino parte activa de la trama: Enrique Ortiz, máximo accionista del Hércules, reconoce, supuestamente claro, como todo, haber ofrecido cuantiosas cantidades de euros para que sus rivales se dejaran vencer y así facilitar el ascenso de un Hércules necesitado del mismo dada su precaria situación económica —quince millones de deuda, una losa para un equipo de Segunda División—.

Los hechos

El pasado 10 de mayo el Hércules se imponía en el Rico Pérez al Córdoba por 4-0. Un mes más tarde, el 19 de junio, el Hércules vencía a domicilio por dos goles al Real Unión de Irún y se proclamaba oficialmente equipo de Primera División en detimento del Betis, partido al que, por cierto, volveremos más tarde.

El País hoy, 3 de agosto, en su sección de Deportes, habitualmente bien dirigida y redactada, desvela ciertas conversaciones que el máximo accionista de la entidad alicantina, el previamente mencionado Enrique Ortiz, turbio personaje que aparece en los papeles de la Trama Gürtel y que ahora capitaliza el protagonismo del caso Brugal, mantiene con un interlocutor del que no se desvela la identidad. Ortiz, imaginamos que henchido de gozo y satisfacción, se expresa en los siguientes términos: "Del anterior, del último que ganamos aquí. Le di 100.000 euros... En el primer gol de Tote se tira para el lado contrario... Es que fue la hostia, macho... El cuatro a cero... 100.000 euros le había dado al portero (...) Al Salamanca le ofrecimos 150.000 euros. No quisieron y les metimos también cuatro".

El gol al que se refiere Ortiz es éste, en el que Tote abre el contador para el Hércules. El portero en cuestión atiende al nombre de Raúl Navas y, según las grabaciones, habría recibido, supuestamente, o habría recibido la oferta, supuestamente, de cien mil euros para que consumara el fraude. Según El País, en esas mismas grabaciones se desvela que el presidente del Hércules habría ofrecido 300.000 euros al Córdoba para que se dejara vencer. El asunto no queda ahí: como expresa Ortiz, el Salamanca rechazó una oferta de 150.000 para perder a propósito; también aparecen los nombres del Girona y del Recreativo de Huelva como supuestos beneficiarios de las primas de Enrique Ortiz.

Cuatro partidos bajo sospecha. Los protagonistas lo niegan todo, como es menester. Raúl Navas, el portero del Córdoba en el ojo del Huracán, dice sentirse "indignado" y que "hacer daño es muy fácil. Todo el mundo va a suponer y nadie saldrá diciendo que me he vendido, por lo que se daña mi nombre". Tote también niega cualquier relación con el asunto. Por cierto, cuando Jesuli confesó a Badiola que cada jugador del Tenerife se había dejado ganar frente al Málaga por 6.000 euros, Raúl Navas era su compañero de equipo. Vasos comunicantes.

Las suposiciones y la teoría de los vasos comunicantes

Vasos comunicantes son los que nos llevan a Iñaki Descarga, defensor que actualmente se desempeña en el Real Unión de Irún y que en su día lo hizo en el Levante. El dato no es baladí: en la temporada 2006/2007, Descarga y el presidente por aquel entonces del Levante, Julio Romero, reconocieron, y así está grabado, que los jugadores de la entidad levantina se dejaron vencer en la última jornada de aquella Liga frente al Athletic de Bilbao para que salvara la categoría. Casualmente, aquel partido lo venció el Athletic con un gol en propia puerta de un jugador del Levante.

Cosas del destino, Iñaki Descarga, en una situación semejante pero inversa por la posibilidad del ascenso y no del descenso, se marcó un gol en propia meta escandaloso en la última jornada de esta temporada frente al Hércules, que se jugaba el ascenso al todo o nada. Repasen la jugada y piensen detenidamente sobre los hechos expuestos previamente. Vasos, casuales, comunicantes.



Como es menester, en los días posteriores al gol en propia meta, Descarga se mostró muy afligido por la presión social que había de soportar, tildándole el espectador de comprado. Tal y como dice sentirse hoy Raúl Navas. En el momento de anotarse el tanto Descarga rompe a llorar desconsoladamente. Observen, una vez más, detenidamente la jugada, pero no lleven sus ojos al número 23 blanco, Descarga, el autor de tan sorprendente gol; fíjense mejor en el dorsal 11 del Hércules. Interpreten el gesto que realiza nada más observar en primera fila la acción de Descarga: manos a la cabeza de incredulidad, sí, pero también, con una interpretación más sutil, de miedo ante una acción excesivamente evidente, ante un pastel descubierto de manera fragrante.

Vasos comunicantes. Nos llevan a la RFEF, máximo estamento del fútbol español. Antes de nada: el juez de Orihuela, encargado de llevar la instrucción del caso, se inhibió por causas que desconocemos y en su lugar el juzgado de instrucción número 7 de Alicante archivó el caso en lo referente a las supuestas primas al no considerarlas delito penal, ya que no lo son. Dejarse perder en un partido de fútbol no es constituyente de delito actualmente, por lo que la responsabilidad ahora recae sobre el Consejo Superior de Deportes y la Federación cuando el juez, que a pesar de la insistencia del fiscal aún no ha movido ficha, se decida a trasladar el caso al CSD.

De no derivar la causa al CSD y a la RFEF el juzgado número 7 de Alicante tampoco deberíamos sorprendernos: en fin, hablamos de la Comunidad Valenciana. En cualquier caso, tampoco nos hagamos especiales esperanzas de ver prosperar dignamente la investigación si llega a manos de los dos máximos organismos del fútbol en este país. Por un lado está Lissavetzky, que ya demostró todo lo que tenía que demostrar con la Operación Puerto y que anda muy ocupado ahora en la creación de una imagen de candidato para optar al liderazgo del Partido Socialista de Madrid; por otro, Ángel María Villar, cuya incompetencia no se puede resumir en un post pero si en un detalle: Descarga y Julio Romero señalaron que el presidente de la RFEF sabía de aquel amaño entre el Athletic, equipo del que es seguidor, y el Levante en 2007. Vasos comunicantes. Y así hasta el infinito.

Las consecuencias

Evidentemente, hay lío. Los implicados se lo han puesto mucho más fácil esta vez que Jesuli y Badiola en su día, las pruebas —¿también debería decir aquí que son supuestas?— apuntan a un amaño de partidos que dejó al Hércules en Segunda División. Huelga decir lo siguiente: no se valora el mérito del Hércules para ostentar una plaza en la máxima categoría del fútbol español, ni el éxito de las negociaciones de su presidente para amañar los partidos, sino la intentiva. Un paralelismo válido para esta situación: el árbitro no valora que un defensa le rompa la cabeza a un delantero, sino la intención de hacerlo. Con esto sucede algo semejante, no se debe valorar el hecho de que comprara o no Enrique Ortiz los partidos sino el hecho de que lo intentara, de que ejerciera el soborno aunque no tuviera el éxito esperado.

Tan sólo por las declaraciones de Ortiz la investigación debería ser abierta y, de demostrarse todo y resultar ser cierto, el Hércules castigado. Desconozco en qué grado, pero desde luego ejemplar. Los aficionados del Hércules no tienen la culpa de nada, claro, pero tampoco los del Betis, equipo que ya ha interpuesto una queja formal en la Federación exigiendo el descenso del Hércules y el ascenso del Betis. No se trata de castigar a una afición, olvidemos ese argumento demagógico, sino de demostrar que los actos ilegales al margen de las reglas establecidas en el fútbol queden castigados. De no hacerlo, la impunidad reinará.

Aunque, bien pensado, la impunidad ya reina. ¿Alguno de ustedes recuerda qué sucedió con el caso Jesuli? Nadie, claro. Yo tampoco, y el motivo es sencillo: no sucedió nada, y hoy, apenas dos años después, pocos recuerdan aquel turbio episodio. Agua de borrajas, pelillos a la mar, hagamos como que no ha pasado, nuestro fútbol es limpio, blanco nuclear, refulgente, impenetrable por la corrupción, oasis en un país corrupto, paradigma de la época de oro y de platino y de zirconio del deporte español —Chimoeneas dixit—. Mejor no tocarlo.

"Desconozco hasta dónde llegan los amaños de partidos. Desconozco quién puede estar dentro del escándalo. Pero pondría la mano en el fuego a que ni es ni será el último caso que salga a la luz. Barrer un poco el piso no viene mal de vez en cuando. Parece que sale algo y la gente se olvida de todo el polvo que queda dentro. La cuestión es ¿cuánto polvo tenemos en casa?" - Un deporte de caballeros practicado por villanos, Más que Fútbol, 3 de diciembre de 2008.

El párrafo sigue de rabiosa actualidad.

Lectura recomendada | Que el espectáculo no pare (Más que Fútbol) | Un deporte de caballeros practicado por villanos (Más que Fútbol) | "Le di 100.000 euros al portero y se tiró para el otro lado en el gol de Tote" (El País) | Betis y Cádiz apelan ante la federación (El País) | Más sombras sobre Ortiz y el ascenso del Hércules a Primera (El Mundo) | España: escándalo por un supuesto soborno de un club para ascender a Primera (Clarín) | Un promotor omnipresente (El País sobre Enrique Ortiz)
Imagen | Marca | El Mundo