viernes, 12 de octubre de 2007

La soledad de Luis


La selección vuelve por sus albores y lo hace visitando Dinamarca, tierra de vikingos y bueyes. Allí donde los ciclistas se hacen escaladores cuando no hay montañas y allí donde de vez en cuando sale una estupenda generación de jugadores.
No es el mejor momento para que la selección visite un campo comprometido, porque la situación se ha vuelto extremadamente tensa para el combinado nacional. Luis y los suyos están en el punto de mira, pero más allá del mal juego resultón de la selección, todas las críticas se condensan en la persona del seleccionador, crucificado desde que anunció en Oviedo que no hablaría más con la prensa.

Cuando en 2004 se supo que Luis Aragonés iba a ser el seleccionador nacional, me alegré en cierto modo. Veía en Luis ese golpe de autoridad y de confianza que la selección necesitaba para recuperar su identidad si es que alguna vez la tuvo. Pero pronto adiviné que el periplo de Luis por el combinado nacional no iba a ser un camino de rosas con el apoyo de todo el mundo, como ilusamente creí cuando se le designó tras el estrepitoso fracaso de la selección en Portugal. Luis en su día fue querido por todo el mundo. Luis hoy, es detestado por todo el país. No le quedan apoyos, está solo en un camino difícil porque tiene obstáculos, y gordos.


El más importante es Raúl. Ignoro como casi todo el mundo, qué haría el jugador madridista durante la concentración en Alemania, pero desde luego debió ser algo que a Luis le cabreó muchísimo, porque desde entonces al ya mítico jugador blanco lo tiene exiliado del grupo, viendo en él un elemento subversivo que no hace otra cosa más que tensar los ánimos en un equipo que se juega la vida en cada partido que juega.
Para mí Raúl es prescindible, pero a día de hoy el tema Raúl ha pasado de un ámbito deportivo a un ámbito mediático, un debate que sirve para alimentar la prensa de cada día y especialmente, un debate que se utiliza para finalizar la encrucijada que los diarios deportivos llevan a cabo contra Luis desde que finalizó el Mundial.

Más allá de si debería ser titular o no, la sombra de Raúl sepulta al seleccionador cada día y cada noche. Veo a Luis solo. Muy solo. No le queda nadie, ni siquiera sus propios jugadores, los cuales desconfían de él clamando contra la no convocatoria del capitán blanco.
En cierto modo me da pena. Lo veo tan sólo ante un barranco infinito que no puedo descargar contra él mi ira, o mi rabia por las lamentables actuaciones del equipo español. Sólo me queda desearle suerte, no veo qué más puedo hacer. El infierno en el que se ha convertido la experiencia nacional de Luis hace que pierda toda la ilusión y las ganas de sentarme en el sofá para ver la roja. Lo dicho, suerte y a por Dinamarca. No confío en la selección, pero a ver que sale, Luis.

Fotos | Marca, Especiales Planet Fútbol

Más que Fútbol ● 2007

1 Comentarios:

Jesús Sousa dijo...

Pues miren. Sin Raúl, sin Villa, sin Torres,... Tamudo adelantó a España con un gran cabezazo, Sergio Ramos hizo pensar que España era Brasil con una jugada de equipo en donde el Tiki Taka fue para chuparse los dedos. Vaya golazo del debutante Albert Riera, lo de hoy me ha gustado. Ha tenido buena pinta. Sin Raúl, sin Villa, sin Torres... jeje!!

SALUDOs!!!!